Por Luis Pérez Reyes. Arqueólogo. Mg. Paleontología. Director del Museo Regional de Iquique .
1.- Antecedentes del Museo Regional de Iquique (MRI).
El Museo Regional de Iquique, es una institución dependiente de la Dirección de Cultura CORMUDESI, la cual es presidida por el alcalde de la Comuna, don Mauricio Soria Macchiavello. Se encuentra ubicado en Av. Baquedano N°951 (Ex Huancavelica 47, numeración que aún conserva en su puerta), entre calles Wilson y Zegers.
El edificio histórico que cobija al MRI desde 1986, es una obra del destacado Ingeniero y Arquitecto Don Carlos Donoso Grille, quien fuera profesional del Consejo Superior de Higiene Pública (1982), precursor en los estudios y aplicación del higienísmo en infraestructura hospitalaria, Donoso Grille como pensador liberal de la época impulsó la creación de la Arquitectura como profesión en Chile, ligada a la ingeniería, y lideró obras emblemáticas como el Palacio de Tribunales de Tarapacá, que cobija al MRI.
El edificio fue inaugurado en 1892 bajo la administración Chilena apenas acabada la guerra civil, y es parte del conjunto patrimonial arquitectónico de Av. Baquedano, siendo junto al Teatro Municipal, uno de los mayores edificios del conjunto patrimonial. Con una arquitectura neoclásica, propia del periodo de auge salitrero (ca 1830-1930), la avenida es declarada Zona Típica (ZT) por el MINEDUC a través de D.S. N°935 el 25 de noviembre de 1977, y el D.S. N°1293 del 15 de noviembre de 1983, que amplía la ZT a la plaza Arturo Prat Chacón, dando protección exclusivamente a los frontis de los inmuebles bajo las atribuciones de la Ley N°17.288 de MN, siendo complementada con la Ordenanza Especial de Edificación Calle Baquedano, de la Ilustre Municipalidad de Iquique del año 1985 (Sánchez, 2006:441-448).
2.- Reseña histórica del Museo Regional como institución.
Si bien como nos aporta el historiador iquiqueño Juan Vásquez Trigo, en 1884 el Intendente de Tarapacá (1882-1884) y editor del periódico El Comercio, don Francisco Valdés Vergara comunica en su descripción de la Escuela Domingo Santa María de Iquique (conocida por los terribles hechos de 1907), un primer museo que existió en su “espaciosa galería que sirve para ventilación de la escuela, i en la cual comienza a organizarse un pequeño museo de los productos naturales de Tarapacá“, no será hasta 1935, cuando el Instituto de Fomento Agrícola y Minero tras la depresión salitrera busca impulsar la economía regional, y funda durante la Semana Tarapaqueña el Museo Regional de Arqueología, Paleontología y Minerales creando la 1ra colección formalmente bajo una institución museológica.
3.- Las Primeras iniciativas de Museos en Tarapacá (1935-1960).
La conformación de un museo como institución depositaria, investigadora, protectora y que difundiera el patrimonio representativo de la Región de Tarapacá, fue por décadas una aspiración de los gestores culturales del Norte Grande, y decimos esto considerando el valioso aporte de diversos gestores culturales no solo de Iquique, sino que además provenientes de Antofagasta y Arica (Alfaro, 1936; Schaedel, 1957; Schaedel & Nielsen, 1957; Bermúdez, 1961; Munizaga & Martínez, 1961; Núñez, 1966; Larraín, 1972; Herrera, 1986; González, 2010; Ojeda, 2011; Ross-Murray, 2016, conv. personal).
En 1935 se realiza la primera exhibición del patrimonio paleontológico, arqueológico y mineral de la región, parte de lo que sería la exhibición del futuro Museo Mineralógico e Industrial de Tarapacá (Alfaro, 1936:166-167), en el Stand del Instituto de Fomento Minero e Industrial de Tarapacá, durante la Semana Tarapaqueña, como parte del plan estratégico del Departamento de Propaganda del Instituto, con apenas un año de funcionamiento y cuya creación en 1934, buscaba el desarrollo económico de la región, tras la crisis del salitre.
En 1954 al disolverse el Instituto por una gestión sin éxito y el definitivo abandono de la producción salitrera e industrial en la región (Donoso, 2013), no logra concretarse la iniciativa de establecer un museo formalmente. Los bienes patrimoniales fueron resguardados por CORFO, quienes más tarde en conjunto con ENAP, generaron uno de los más importantes incrementos del conocimiento regional sobre cultura, geografía, ecología, paleontología y geología, de manera que, producto de las campañas de prospección y reconocimiento de los recursos naturales de la región entre 1958 y 1961 incrementaron ostensiblemente las colecciones patrimoniales. El Dibujante Técnico de la expedición, Sr. Marce Hugo Contreras, (Pérez, 2016) nos facilita antecedentes claves y específicos, siendo él la única persona que queda de aquel equipo de investigación. Citamos:
Esta es la fotografía del primer pozo de exploración de ENAP en Tarapacá. Año 1958. De pie, de izquierda a derecha: Guillermo, Jefe de Bodega; Domingo Torrico Yanqui, Topógrafo; Teresa, Secretaria; Marce Hugo Contreras (con casco), Dibujante; Fresia, Secretaria; no recuerdo nombre de este joven, empleado administrativo; Cortés, encargado de limpieza. Más abajo, de izquierda a derecha, Luis Concha, empleado de bodega. No recuerdo los nombres de los otros dos. Atrás, al fondo, se ve la plataforma de la torre, parte de los conductos de lodo y el eje taladro. El gerente era Don Carlos Mordojovich[1], padre de un médico iquiqueño del mismo nombre. Segundo Jefe era Don Ramón Laval, muerto en un accidente con un helicóptero en faena, en Magallanes. Más o menos en esa época fue hallado el megaterio[2]. ENAP tenía una colección de fósiles que guardaba en el subterráneo del edificio ubicado frente al Colegio Don Bosco, en actual Avenida Arturo Prat[3].” (Pérez, Nielsen & Sandoval, 2017)
Durante estos años, variadas iniciativas de gestión patrimonial de diversas instituciones como la Universidad del Norte (fundada en 1957), posteriormente denominada Universidad Católica del Norte), CORFO, ENAP, y la Universidad de Chile Sede Iquique, formarán diversas colecciones patrimoniales que en la década de 1960 darán origen a las primeras exhibiciones formales. En efecto, en 1959 durante las prospecciones que realizara el equipo de la ENAP en la Pampa del Tamarugal, y tal como menciona Contreras en testimonio anteriormente citado, hallan los restos fósiles de un Megaterium adulto, casi completo, en conjunto con restos de otros animales, será exhibido brevemente en Iquique durante los días 12 y 13 de julio de 1959, pero desacertadamente será trasladado a Santiago, donde por condiciones climáticas verá acelerado su proceso de deterioro. Fuenzalida (1963:4-5) indica al respecto (con un error en la fecha):
“ En 1958, los geólogos que trabajaban en busca de petróleo en las regiones de la Pampa del Tamarugal, tuvieron la oportunidad de encontrar un importante osario. Dentro del material movilizado por una corriente de barro, en las vecindades del Salar de Pintados, aparecieron los restos de un importante cuadrúpedo, tal vez de un 4-5m. de envergadura, cuyo esqueleto no se había desintegrado. Parece que el animal fue transportado antes de haberse descompuesto, de tal manera que el esqueleto se encontraba casi intacto. Junto con los huesos de este cuadrúpedo que correspondía a un Megatherium, se encontraron huesos de algunas aves, de formas parecidas al guanaco actual, y de algunos roedores. Es dudoso que los restos del Megatherium hayan sido transportados junto con los restos de otros animales; posiblemente al quedar se cuerpo al descubierto, dio oportunidad para que se congregaran algunas rapaces y que otros organismos aprovecharan sus restos para nutrirse, generándose una pequeña asociación. Este Megatherium fue recogido y trasladado a Iquique, en donde los mismos geólogos que lo encontraron lo armaron provisoriamente y se mantuvo algún tiempo en exposición, para satisfacer la curiosidad pública que se había suscitado al respecto. Fue gracias, particularmente al celo del Prof. Giovanni Ceccioni, geólogo de la ENAP, por ese entonces y actualmente profesor de la Universidad de Chile, como pudo hacerse la recolección de la osamenta en el terreno, y posteriormente su traslado y montaje en Iquique. Posteriormente, los huesos fueron encajonados y enviados al museo Nacional de Historia Natural de Santiago (1959) en donde se han guardado hasta ahora[4], En efecto, muchos de sus huesos estaban en mal estado de conservación, reducidos a una condición granulenta, cuestión que dificulta su manejo y restrinje la posibilidad de proceder a su montaje.”
En Julio de 1959, un reportaje de la revista VEA, en contradicción de año con la publicación de Fuenzalida 4 años más tarde, indica el mes del hallazgo en junio de 1959, y presenta un importante testimonio gráfico:
“ Recientemente en junio del presente año, algunos técnicos de ENAP encontraron y excavaron los restos de un ejemplar bastante completo de megaterio, unos pocos kilómetros al noroeste de Pica. Este ejemplar ha sido exhibido al “público en Iquique, someramente armado, y pronto será enviado al Museo de Historia Natural de Santiago, para ser estudiado exhaustivamente. Iquique, julio de 1959”
El Tarapacá, con datos fidedignos y directos de los hechos en breve nota con fecha domingo 12 de julio de 1959 publicará una fotografía del ejemplar junto a Cecioni en dependencias de la ENAP. Y extenderá la invitación por vez exclusiva a la ciudadanía para ver el ejemplar en dependencias del Regimiento Lynch, citamos:
“ Los iquiqueños tendrán hoy y mañana las únicas oportunidades de mirar el esqueleto, provisoriamente reconstituido del fósil de un animal antediluviano encontrado en los alrededores de Matilla y el que debió vivir en la época cuaternaria en la zona que hoy corresponde a la cordillera de los Andes o el altiplano. […] Debido a que el citado esqueleto constituye uno de los hallazgos más importantes hechos hasta la fecha y tiene un valor inapreciable para la ciencia de la paleontología chilena, solo será exhibido hoy y mañana en el patio del regimiento Lynch, ya que deberá ser remitido esta misma semana al Museo de Historia Natural de Quinta Normal para su reconstitución y clasificación definitiva. La somera reconstitución hecha por el profesor Cecione de la Empresa Nacional del Petróleo permite darse una idea de la enorme estatura que tenía el animal prehistórico, pudiendo estimarse en superior a los 4.50 mts toda vez que solo la espina dorsal tiene un largo superior a los 2.50 mts.”
Retomando, los antecedentes históricos que dan origen al MRI, es necesario indicar aquí que ya en la década de 1950 en forma autodidacta algunos gestores locales y grupos de investigación sobre cultura y también ligados Teatro de la región de Tarapacá, ya que estaba en un proceso de búsqueda de las identidades representativas del Norte Grande. Estas agrupaciones asociadas a instituciones educacionales, de investigación, así como particulares, pondrán en valor el acervo cultural y patrimonial pretérito de la región.
Destacarán entre ellos una exhibición arqueológica particular denominada Exposición Regional, de don A. Nielsen realizada a mediados de la década del ’50 en el Casino Español, colección que como fue su anhelo a futuro irá a “servir de base para la fundación de un Museo Regional de Arqueología de Tarapacá”.
En el segundo semestre de 1959, en palabras de don Oscar Bermúdez, don A. Nielsen “tenía el propósito de hacer una exposición de su labor arqueológica, por primera vez y a invitación de la Revista Chilena de Historia y Geografía, que le daría publicación” (Bermúdez, 1961:17; Munizaga y Martínez, 1961), lamentablemente fallece sin lograr concretarlo.
El mismo año 1959, un grupo de estudiantes del Liceo de Hombres junto a los profesores J. Romero, J. Cubas y C. Francke, montaran una exhibición representativa y permanente de la arqueología y paleontología local en lo que será formalmente el Centro Arqueológico de Iquique, y cuyos bienes patrimoniales provenían de recolecciones y donaciones informales (Rojas, 1986; Téllez, 2004:3; Ross-Murray, op. cit.; Ojeda, 2011). De interés es una pequeña nota publicada por El Tarapacá el Viernes 18 de diciembre de 1959, sobre la procedencia informal de colecciones citamos:
“ Una Colección donará ex Alumno del Liceo a Centro Arqueológico.
Lautaro Núñez, ex alumno del Liceo de Hombres de Iquique y que actualmente estudia Antropología en la Universidad de Chile, donará una colección particular al Centro Arqueológico del establecimiento secundario local. La colección está formada por material de la zona norte. Además, Lautaro Núñez prometió colaborar en la creación del Museo Regional, para lo que desarrollará un amplio plan de actividades en la zona norte para las vacaciones.”
La exhibición de 1959 incitará a los recién creados planteles académicos universitarios y autoridades locales a tomar con seriedad la necesidad de crear una institución museológica formal, un Museo Regional, ya que la tenencia informal de bienes patrimoniales en Iquique venía desde hacía ya décadas incrementándose dada su abundancia y libre accesibilidad a los sitios y yacimientos patrimoniales en diversos puntos de la región. En efecto esta gestión fue vista como una amenaza a diversos coleccionistas e intelectuales, tal como será manifestado en la Semana Tarapaqueña de 1959, alentando a los profesores Corrotea y Cubas a seguir adelante con el proyecto de Museo Regional.
Conocida era la afición de algunos particulares que guiados por el diletantismo acumulaban bienes patrimoniales en sus casas, y cuya extracción ya se había tornado una actividad descontrolada para las autoridades. En efecto, el mencionado caso del Vicecónsul de Dinamarca, el Sr. Anker Nielsen que desde la década de 1930 venía excavando los antiguos asentamientos costeros al Sur de Iquique generando una colección de cientos de piezas, práctica que también tenían por común vecinos de nacionalidad inglesa (Schaedel, 1957; Bermúdez, 1961:16). En efecto la región ya desde finales del siglo XIX fue estudiada con interés y sus bienes patrimoniales, tanto paleontológicos como arqueológicos extraídos fuera de la región y al extranjero (A. A., 1880 en: Casamiquela, 1970; Gonzales, 2010:17-18).
En 1959 el Centro Arqueológico del Liceo de Hombres realizará diversas gestiones para incrementar las colecciones patrimoniales en exhibición y lograr el objetivo de fundar un Museo Regional. Como indicará el diario El Tarapacá el lunes 3 de octubre de 1959, se proyecta idealmente su fundación a finales de dicho mes, sin embargo, se aplazará hasta el año siguiente. Citamos:
“ En la última semana del presente mes y coincidiendo con la celebración de las Bodas de Diamantes de la Provincia de Tarapacá, será inaugurado en Iquique el Museo Regional, para cuyo efecto están trabajando entusiastamente los integrantes del Centro Arqueológico del Liceo de Hombres. Como es sabido el Centro Arqueológico ha realizado excursiones a los alrededores de la ciudad y al interior de la Provincia, para obtener material que irá en incremento de la formación del Museo. Además, se ha solicitado la colaboración de la ciudadanía, quienes han respondido ampliamente donando numerosos objetos de mucho valor.”
4.- El MRI en el periodo 1960-1987. La Institución Formal.
Un año después de la acertada presentación patrimonial del Centro Arqueológico de 1959 en el Liceo de Hombres de Iquique, la Universidad del Norte crea formalmente el Museo de Historia y Arqueología de Tarapacá conocido como Museo Regional (6 de noviembre de 1960). En la Lista de Realizaciones Logradas el domingo 01 de enero de 1961, el diario El Tarapacá publicará:
“ Culturalmente Iquique mejoró su inventario con la creación del Museo Histórico Regional, iniciativa feliz de la Universidad del Norte y del profesor liceano iquiqueño Señor Julio Romero Corrotea. El Museo tiene un catálogo reducido, pero es incuestionable que en breve plazo será uno de los más interesantes de la zona norte.”
Esto fue posible tras la importante transferencia de bienes patrimoniales extraídos informalmente desde contextos arqueológicos costeros que se desconocen con exactitud, y que fueran entregados por el Liceo de Hombres. Una muestra de ello nos dan las breves notas publicadas constantemente en El Tarapacá informando diversas donaciones de particulares que realizaron donaciones inicialmente al Centro Arqueológico con miras a constituir el Museo Regional, por ejemplo esta nota del Tarapacá, domingo 27 de diciembre de 1959:
” Una Valiosa donación registró el Centro Arqueológico de Iquique.
Valiosa donación recibió el Centro Arqueológico de Iquique, de parte de los profesores Juan Blanco y MArio Contreras de la Escuela de la Localidad de Enquelga, quienes hicieron entrega de una caja con utensilios, instrumentos musicales y otras especies, que fueron usadas por los indios que habitaron el Departamento de Pisagua.
Según lo manifestado por los profesores donantes, esta es una colaboración a la creación del futuro Museo Regional, tarea en la cual está abocado el Centro Arqueológico de Iquique.
Los objetos entregados son los siguientes: 2 cacharros de greda; 7 fajas o “huacas”, con dibujos coloreados; 6 instrumentos musicales; 1 tarca y 6 lichiguayas; 1 soga; 3 quirquinchos embalsamados y huevos de ñandú y de perdíz.”
Otra nota del Tarapacá, miércoles 1 de noviembre de 1961 nos indica nueva donación:
” Colección de monedas antiguas fue donada al Museo Histórico Regional.
En un gesto que lo enaltece el Sr. Francisco Sanhueza Suárez, ha donado una valiosa colección numismática al Museo Regional. El conjunto comprende monedas nacionales, peruanas, bolivianas, francesas, chinas y alemanas, fechadas en el siglo pasado y a comienzos del presente. Además, el Sr. Sanhueza obsequió diversas “fichas” de antiguas oficinas salitreras, tales como Carmen Bajo, Lagunas, etc., y algunos materiales arqueológicos de la zona. La Dirección del Museo nos ha solicitado hacer público sus agradecimientos por la gentil donación del Sr. Sanhueza y anunciar que la colección de monedas será exhibida al público desde mañana jueves de 18.30 a 20.30 horas. En la misma oportunidad será también inaugurada una interesante muestra de fotos de Iquique en el año 1904.”
El MRI será implementado en el segundo piso de un antiguo edificio de calle Bolívar N°477, actualmente propiedad de la IMI y funcionará allí por un par de años, para luego trasladarse a Baquedano N°930, a mediados de la década de 1960, junto a las dependencias del Centro de Extensión Cultural de la Universidad del Norte[5]donde permanecerá hasta 1981.
La Universidad del Norte designará en don Julio Romero la Dirección formal del nuevo Museo Regional, asumiendo una gran responsabilidad con el patrimonio regional, lo cual venía activamente consolidando con diversas actividades y capacitaciones Una breve nota del 5 de marzo de 1960 presentará la noticia:
” Julio Romero designado Director del Museo Regional de Iquique.
El señor Julio Romero Corrotea, Profesor del Liceo de Hombres y uno de los activos integrantes del Centro Arqueológico del establecimiento fue nombrado Director del Museo Regional que creará en Iquique la Universidad del Norte. El Señor Romero regresó ayer a esta ciudad, después de haber asistido a un curso de Antropología en la Capital y de haber visitado los principales centros de arqueología de la zona norte. En Antofagasta, se entrevistó con el ex Rector de la Universidad del Norte R. P. Gerardo Claps Gallo S. J. para recibir instrucciones sobre la creación del Museo de Iquique, que tendrá lugar este año. El señor Romero, después de conocida su designación, ha sido muy felicitado por sus numerosas relaciones y colegas del Liceo de Hombres donde se desempeña como profesor de Artes Plásticas.”
Será en 1960 que se realizará el ingreso formal de la Colección Paleontológica o Mineralógica al Museo Regional de la Ilustre Municipalidad de Iquique como uno de los aportes de la CORFO, colección mencionada por Contreras en cita anterior, y que era utilizada y conservada en dependencias de la institución para apoyar la identificación de especímenes recolectados para muestreo en el marco de los proyectos de reconocimiento y prospección geológica en la región.
En el primer aniversario del Museo Regional de Iquique, El Tarapacá nos entregará antecedentes explícitos al origen de la colección paleontológica, relacionando con claridad los antecedentes otorgados por el Sr. Marce Hugo Contreras, dándole sentido además a la existencia de la colección paleontológica de megafauna ingresada por Cecioni al MRI, a través de ENAP.
“ EL MUSEO REGIONAL DE IQUIQUE CUMPLE HOY UN AÑO DE VALIOSA LABOR CULTURAL.
Lo dirige el profesor Sr. Julio Romero Corrotea. – Numerosas colecciones han enriquecido sus muestras. – Miles de personas lo han visitado – Un problema que se agravará: la estrechez de su local. –
Empeñado en una valiosa y desinteresada labor cultural en beneficio de los habitantes de esta ciudad se halla el Museo Regional de la Universidad del Norte al cumplirse el primer aniversario de inauguración.
El Museo Regional es la única entidad de carácter universitario existente en Iquique y abrió sus puertas hace un año, el 6 de noviembre de 1960, siendo su director, desde entonces el señor Julio Romero Corrotea. Su gestación es producto del espíritu visionario del ex Rector de la Universidad del Norte, R. P. Gerardo Claps, habiéndole correspondido inaugurarlo personalmente al ex Rector R. P. Francisco Dussel. La Universidad del Norte tuvo como punto de partida la labor previamente desarrollad por el Centro Arqueológico del Liceo de Hombres organizado por los profesores Julio Romero y José Cubas con algunos alumnos y, luego la colección Mineralógica de la Corporación de Fomento de la Producción[6] donada por la feliz iniciativa del Ingeniero Jefe de la oficina local señor Enrique Rogers Sotomayor.
Actualmente, el Museo cuenta con Departamentos de Arqueología, Época Colonial, Guerra de 1879, Industria Salitrera, Mineralogía, Folklore y Fototeca, que son visitados los días martes, jueves, sábados y domingo asistiendo en promedio de cuarenta personas cada dos horas, de 18.30 a 20.30 horas. Además, en jornadas especiales se atiende a profesores y delegaciones escolares.
[…] Semanalmente, la Dirección del Museo realiza labor de extensión cultural por la radio emisora almirante Lynch, en su programa “Domingo a las 21” en la que colaboran habitualmente los señores Dusan Teodorovic, Roberto Villena y señora Ana Haller.
ENCARA UN PROBLEMA.
El problema más importante que encara el Museo en la actualidad es el de la estrechez de su local, debido no solo al aumento de las colecciones que deben permanecer en bodega sino al hecho de que el público aumenta constantemente a visitar sus dependencias. Se hace necesario un local más amplio, pero, mientras tanto, se estudia la redistribución del espacio de exposición para dar cabida a las nuevas muestras provenientes del Departamento de Excursiones, a cargo de los Señores Carlos Francke, Hugo Contreras y Enzo Alfaro y de donaciones de numerosas familias iquiqueñas, todo lo cual está enriqueciendo paulatinamente el material del Museo. Gran colaboración se ha recibido en este sentido, de parte del Ingeniero Jefe de la ENAP, señor Carlos Mordojovic y de un grupo de personal especializado de esta empresa[7]”.
Tras la muerte de Anker Nielsen, su Colección Arqueológica estaba destinada a salir del país y ser entregada al Museo Real de Copenhague, sin embargo, gracias a una serie de acciones legales y administrativas, logra ser recuperada, adquirida por el Municipio y conservada en Iquique, primero en un galpón municipal, y luego en la Sede de la U.de Chile. El Domingo 8 de enero de 1961, el diario El Tarapacá indica:
“ Ante el Notario Público don Arturo Carvajal Escobar quedó firmada la escritura pública de compraventa de la valiosa colección de especies arqueológicas que a través de largos años logró reunir el extinto ciudadano danés don Ancker Nielsen cuya sucesión la vendió a la Iltma. Municipalidad de Iquique luego de gestiones que duraron varios meses ante el interés demostrado por entidades de otras provincias y aun del extranjero, para adquirirlas.
Firmo la escritura en representación de la sucesión vendedora el abogado Octavio Gutiérrez Carrasco y por parte de la Municipalidad el Tesorero Provincial señor Agustín Durán. El precio de venta fue de diez mil escudos, pagados al contado. La colección quedo depositada en una bodega municipal a la espera de que personal especializado de la Universidad de Chile venga a clasificarlo. Una vez cumplido este trabajo será expuesta al público en un museo cuya ubicación deberá decidirla la Dirección de Obras Municipales”.
El arqueólogo C. Munizaga y S. Martínez, abogado en 1961, indican al respecto:
“ Constituye también la Colección Nielsen un magnífico conjunto para la exhibición al público e ilustración del fenómeno de desarrollo antes mencionado, lo que la transforma en un valioso instrumento pedagógico regional. Afortunadamente, la I. Municipalidad de Iquique ha adquirido la Colección Nielsen y hoy ella forma parte importante del Museo que existe en esa ciudad.”
Esta última información es de interés para la historia de la protección patrimonial en Chile, incluyendo los bienes patrimoniales naturales o paleontológicos ya que a raíz de las tramitaciones por evitar la salida de la colección Nielsen del país, se dictó en 1960 de manera urgente el Decreto N°479 del Ministerio de Economía y Comercio. El decreto N°479 prohibirá a futuro “la exportación de piezas arqueológicas, etnológicas, antropológicas y paleontológicas”, limitando legalmente el expolio, tráfico y comercio de bienes patrimoniales.
En 1966 se funda en forma paralela un segundo museo en Iquique, denominado Museo Arqueológico, en dependencias del Centro Zona Norte la Universidad de Chile, ubicado en la planta baja del edificio de Serrano N°579, y que posteriormente pasará a ser del INP. Para aquellos años las intenciones académicas estaban orientadas potencialmente al estudio cultural y geográfico del Norte Grande, Lautaro Núñez (1965:7) un año antes de la fundación del museo de la Universidad de Chile en Iquique, se refiere a la situación del patrimonio en el Norte Grande y la necesidad de una institución que resguarde el abundante patrimonio regional, ya que todos los bienes patrimoniales recolectados por él en la región eran trasladados a Calama, donde funcionaba el Departamento de Arqueología de la U. de Chile.
“ Las experiencias obtenidas en Calama nos han indicado la importancia de los museos regionales en relación con toda comunidad urbana, y en especial como factor complementario del proceso educativo. Esto nos ha llevado a la organización de museos arqueológicos en Tocopilla e Iquique, ciudades hasta ahora marginadas del desarrollo de aseos regionales prehispánicos, hecho que logra caracterizar la última década de las actividades arqueológicas del país. […] Seguramente los objetivos anteriores son demasiado amplios y requieren de un equipo de profesionales, a medida de su crecimiento. Pero hemos esquematizado un comienzo con miras a establecer y la Universidad de Chile Zona Norte un núcleo de investigación permanente que cubra las diversas zonas arqueológicas, salvando los restos arqueológicos de manos inexpertas, y, por otro lado, interpretando objetivamente el pasado prehispánico regional.”
Un sábado 17 de diciembre de 1966 se inaugurará el anhelado Museo de Iquique o Museo de Arqueología de la Universidad de Chile que, como indicará prensa local se ubicará en:
” Una sección del local de calle Serrano 579, sección que fue cedida gentilmente por el Servicio de Seguro Social y que ha sido habilitada por la firma contratista mediante un remozamiento general y la construcción de las vitrinas e implementos especiales para dar cabida a los materiales con que contará el Museo. La parte principal de dichos materiales está constituida por la colección Arqueológica NIelsen, que la Ilustre Municipalidad de Iquique traspasó tiempo atrás para su exposición al público.
La Colección Nielsen será entregada públicamente a la Universidad de Chile en el acto inaugural que comentamos y, a su vez, la Universidad abrirá a la ciudadanía a contar de la misma fecha.
Al ponerse el Museo de Iquique al servicio de la comunidad se ha dado fina al primer paso en las actividades que sobre la materia la Universidad de Chile está interesada. La primera etapa del Museo será de Arqueología más adelante, de acuerdo a los recursos en especies de valor, instalaciones, etc., se irá a la formación de una segunda secció, que será histórica. Cabe señalar que han sido numerosas las personas que han estado haciendo ofrecimientos de piezas históricas para el Museo en su futura nueva sección.
Los trabajos de clasificación de las piezas arqueológicas y su ordenación en el Museo han estado a cargo del Arqueólogo don Lautaro Núñez, quien además, participa en interesantes excavaciones en la quebrada de Tarapa´ca junto con el Arqueólogo Delbert True y el señor Patricio Nuñez, ambos enviados a efectuar tales trabajos por el Convenio Universidad de Chile – Universidad de California.”
En el periodo comprendido entre 1965-1979 el Sr. Jorge Checura asumirá la Dirección del MRI, dando un impulso a la gestión del Museo, integrando las colecciones en un guion museográfico coherente bajo una línea evolutiva e histórico cultural. Desarrollará esta tarea junto al Dr. Horacio Larraín, Antropólogo y Arqueólogo cuya participación será como Director del Instituto de Estudios Históricos y Arqueológicos, del Centro Universitario de Iquique, de la Universidad del Norte, instancia en la que realizarán publicaciones esporádicas a través de los Cuadernos de Investigaciones (Larraín, 1972) desde el 5 de junio de 1972; y paralelamente el Boletín Informativo (Larraín, 1972) como órganos de difusión del MRI. Checura, Director del MRI, formalizará sus estudios profesionales en México, gracias al programa de la UNESCO, retornando con nuevas ideas que mejoren el Museo.
La década de 1970, será uno de los periodos más fructíferos del Museo Regional. Investigadores y en ese entonces estudiantes como Olaff Olmos, Arqueólogo, Raúl Torres, Ítalo Lanino, Abraham Esperidion, Eliana Carrión y darán un impulso al MRI a un periodo de producción científica con publicaciones e incremento de las colecciones recolectadas en contextos de investigación con metodologías adecuadas y profesionales. Investigadores externos como Grete Mostny, Arqueóloga, Dr. Gustavo Le Paige, Lautaro Núñez, profesor de Historia y Arqueólogo, Carlos Viviani, Daniel Frassinetti, Paleontólogo, Giovanni Cecioni, Geólogo, Oscar Bermúdez, historiador, los geólogos Juan Bergoeing, Luis Velozo, y el geógrafo Hugo Bodini entre otros, harán valiosos aportes en arqueología, antropología, geología, geografía y paleontología regional.
Checura en su INFORME SOBRE ACTIVIDADES ANTROPOLÓGICAS, Capítulo referido a Chile, (Iribarren, 1975:25) sobre la situación del patrimonio regional de Tarapacá, la gestión museológica y el desarrollo de investigaciones en Iquique, indica los siguiente:
“Iquique. En Iquique existen dos museos, uno de la Universidad de Chile y otro de la Universidad del Norte en regular presentación museológica, pero sin actividades científicas de investigación.”
En 1970-1972 el Antropólogo y PhD. Arqueólogo, Don Horacio Larraín Barros dará al Museo Regional una línea científica, en un Chile que vivía un proceso social con un creciente interés en la identidad regional y pasado originario de sus pueblos. Creará el Instituto de Estudios Antropológicos al alero del museo y en 1972 concretará la primera revista de divulgación científica del Museo Regional, y promoverá el incremento de colecciones por la vía de la donación de numerosas colecciones particulares. Alentará al gestor cultural iquiqueño Jorge Checura Jeria a estudiar y tomar los cursos de Museología que tuvieron lugar en el Convento de Churubusco en México. Posterior a eso el Director J. Checura retornará a Iquique iniciando un aporte sustantivo a la investigación sobre el pasado regional con investigaciones en Pampa Iluga, Huarasiña en 1971 con un equipo multidisciplinario de investigadores de la Universidad del Norte, entre los que destacarán personalidades en el ámbito de la investigación del Norte Grande como Oscar Bermúdez, Daniel Frassinetti, Juan Bergoeing, Hugo Bodini, Luis Velozo.
Durante la Dictadura Cívico-Militar, don Jorge Checura seguirá como Director entre los años 1973 hasta 1979. El Museo verá un periodo de actividades de educación en que promoverá en estudiantes las escuelas de campo, de la mano de la Universidad del Norte, así como un apoyo constante a grupos folcklóricos y de danza a los que facilitarán elementos etnográficos y artesanales. Paralelamente, a finales de la década el museo impulsará la creación de museos en Pozo Almonte, Nama y el Museo Naval en Iquique. En 1976 con el hallazgo accidental de un ceremonial inca en Cerro Esmeralda (Huantaca), producto de la construcción de un camino para torres de telecomunicaciones, Checura estudiará el valioso hallazgo que pondrá a Iquique en el plano mundial sobre los santuarios de altura con sacrificios ceremoniales Inca.
Numerosos serán los ingresos de hallazgos en la región durante estos años. La colección Paleontológica se incrementará con el ingreso de restos parciales de un Scelidodon y otros muy escasos de Megatherium, los cuales serán aportados por el reconocido profesor Iquiqueño Daniel Angel Frassinetti Cabezas, quién más tarde, será destacado investigador del Museo Nacional de Historia Natural de Santiago, reconocido como Paleontólogo, especialista en mamíferos del Cuaternario.
La sociedad civil por su parte realizará diversas donaciones de fósiles dada la concientización que irá realizando el MRI. Ejemplares fósiles de amonites provenientes de la costa Sur de Iquique, específicamente playa Las Pizarras, otros provenientes del Cerro Tarapacá en Iquique, y de Pachica, quebrada de Tarapacá, en la precordillera de la región, darán representatividad al Mesozoico en la Colección Paleontológica local del MRI.
En 1976 J. Checura ingresará la colección del Qhapaq cocha de Cerro Huantaca (o Esmeralda), y verá después de tres años de labor acuciosa, en 1979 su más importante exhibición de manera permanente en la casona de Baquedano N°930, hasta 1981, ese año será el último en dicho inmueble.
Entre 1981 y 1982, bajo las presiones políticas que obligan a cerrar la sede universitaria y la Casa de la Cultura de Universidad del Norte en Iquique, la administración de las colecciones de los museos de la región quedará a cargo de la CORMUDESI, siendo trasladados sus bienes a las dependencias del Edificio de Ferrocarriles del Estado en calle Sotomayor N°706, donde se implementará el Museo Regional.
Para esos años un gran ventanal escrito con un párrafo en letras blancas recibirá a los visitantes indicando la re-exhibición de la colección Nielsen, después de haber permanecido embalada por muchos años, citamos:
“ Esta colección [8] ingreso al museo de la corporación regional en enero de 1981. Por muchos años se mantuvo embalada en espera que fuera revalorada y evitar así su degradación, sin embargo, su situación no sufrió daños hasta la fecha en que la IMI efectuara su incorporación definitiva a este museo” (Rojas, 1986).
Durante la década de 1980 a 1990 Don Octavio Morales, asumirá la Dirección del museo dándole un desarrollo museográfico considerable. En 1982 el MRI pasará a la administración CORMUDESI y re-ubicado en el Ex Palacio de Tribunales de Iquique en 1986, lugar que conserva hasta hoy. Allí, en conjunto con destacados arqueólogos iquiqueños como don Lautaro Nuñez Atencio y Julio Sanhueza T., que impulsaran un Museo Antropológico en el Instituto Profesional de Iquiqu, conocido por sus siglas como IPI, y que más tarde pasará conformar la UNAP, en 1985 generarán un guión museográfico que reúna la larga historia regional.
El lunes 20 de enero de 1986, son trasladados los Tribunales de Justicia a su nuevo edificio en calle Sotomayor, junto a la antigua estación de Ferrocarriles. (La Estrella de Iquique, 19 de enero de 1986), y a su vez iniciará un nuevo periodo el Museo Regional funcionando este en el primer piso del ex Palacio de Tribunales de Tarapacá mientras que la Corporación Municipal de Desarrollo Social que funcionara en el segundo piso.
La importancia del Museo Regional a nivel nacional se verá reflejada en las Jornadas Museológicas, del cual nuestro museo será sede.
En el intertanto, en 1985, don Manuel García, comunero de Colchane, junto a sus hijos, construirán bajo técnicas tradicionales vernáculas la única aldea aymara existente en un museo, constituyendo un valioso espacio para la cultura aymara en Iquique. En efecto, será esta la locación que en que el Grupo Calichal imortalizará su retorno a Iquique, luego de triunfar en el Festival de la Canción de Viña del Mar con su obra “La Reina del Tamarugal”, dedicada a Nuestra Señora Virgen del Carmen de La Tirana.
En 1989 nuestra institución será organizadora de las VI Jornadas Museológicas Chilenas, realizada en el mes de agosto los días 14 al 18. La organización estára a cargo del Comité Nacional Chileno de Museos, la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Iquique, y el Museo Regional, quien también financiara en conjunto con la DIBAM, sentando un hito en la historia de la museología chilena.
Durante la década de 1991 al 2001, Cora Moragas Wachtendorff, arqueóloga, quien se desempeñara dedicadamente en el trabajo con colecciones del Museo en el Depósito General durante parte de la década de 1980, asumirá el MRI dando un impulso profesional a la nueva arqueología regional e impulsa la oficina regional del CMN.
Su mirada científica afiatará nexos con la arqueología nacional, y cimentará la labor de resguardo patrimonial del museo como institución con acciones de rescate y valoración en toda la región. Su participación en congresos, lazos con ICOMOS, y publicaciones científicas darán al museo un impulso científico con significativos aportes a la arqueología regional y de Chile. En efecto, será la impulsora de considerables denuncias sobre el daño patrimonial regional, abriendo un espacio a la protección patrimonial desde lo legal e institucional en nuestra región.
Del 2001 al 2003 el Director Don. Patricio Muñoz Escribar, orientará el MRI a la ciudadanía y turismo, el incremento de cruceros y visitas de turistas internacionales generará en el museo la necesidad de modernizar su administración y gestión interna.
De la mano de la creación de la carrera de Arqueología en la Universidad Bolivariana en Iquique, en alianza con el Museo Regional y el Instituto de Estudios de Ciencia y Tecnología Andina IECTA con destacados académicos e investigadores del Norte Grande como Juan Van Kessel, Horacio Larraín, Olaff Olmos, Orlando Acosta, Gerda Alcaide, Álvaro Romero, y Francisco Téllez, se generará un ambiente propicio para dar un nuevo impulso científico al Museo. La Dirección será asumida por el Arqueólogo antofagastino Francisco Téllez Cancino (2003-2006 y 2011-2015♰) quién proyectará un ambicioso diseño de nuevo museo que no logrará concretar, sin embargo generará la nueva sala Colección Isluga, y constantes exhibiciones temporales.
La Historiadora Orietta Ojeda (2007-2010), asumirá la Dirección del Museo Regional con una efectiva gestión ligada a colaboraciones de inversión minera privada, concretará la creación de la Sala Cerro Esmeralda y la Conservación preventiva de colecciones del Qhapaq cocha Inca. Desarrollará la primera plataforma web de difusión del museo, y publicará un catálogo conmemorativo de los 50 años del Museo Regional de Iquique, que tendrá traducción a 3 idiomas, orientado a turistas europeos.
El ex sacerdote y Sociólogo don Pablo García Vásquez, asumirá la dificil tarea de subrogar la Dirección durante los años 2015 a 2018, posterior al lamentable fallecimiento del arqueólogo Francisco Téllez. Durante su gestión acogerá y dará continuidad a proyectos colaborativos que dejará Téllez, destacando la concreción de la Sala Tarapacá desde el Origen de la Vida, (parte de la tesis de postgrado en paleontología del arqueólogo iquiqueño Luis Pérez Reyes).
En febrero del año 2019, asumirá la Dirección el Arqueólogo iquiqueño y Mg. Paleontología Luis Alejandro Pérez Reyes, en el complejo escenario de cambio climático que empezó a enfrentar la región en los últimos años. Con su actual dirección el Museo Regional de Iquique ha visto una reforma total tanto en su administración como en infraestructura y organización interna. Inició un proceso de diagnóstico general que evidenciara las falencias y áreas en las que la institución debe modernizarse y elevar sus estándares, y paralelamente implementó soluciones de corto plazo para mejorar la infraestructura del centenario edificio patrimonial a la vez que lograr un resguardo efectivo de los miles de piezas que reúne la institución tanto en depósitos como en salas. Una de ellas fue el recambio total de techumbres, incorporando un complejo sistema de cubierta para todo el edificio. En lo administrativo creó por primera vez departamentos internos en las áreas de Historia, Arqueología, Paleontología, Conservación y Restauración, Educación y Mediación, y Depósito y Registro de Colecciones, con lo cual se ha incorporado a la planta laboral profesionales en diversas áreas. Durante el año 2019, producto de daños por fenómenos climáticos, el museo vió un cierre momentáneo seguido de una apertura progresiva, conforme se ha restaurado por sectores el edificio. Se dió continuidad al proyecto de Biblioteca y Archivo del Museo, que dejará Francisco Téllez, se restauró y creó el Salón de Conferencias, la sala museográfica de história del edificio y la sala museográfica de historia del museo y la arqueología en Tarapacá. Se creo la nueva sala de exhibiciones temporales para dar un espacio de alto nivel a los nuevos artistas y creadores de la región, amalgamando la cultura ancestral a las expresiones de las nuevas generaciones de artistas. Se restauró el hall central del segundo piso, y el hall central del primer piso para la exhibición de muestras temporales. Se implementó por primera vez una puesta en valor de la Aldea Andina, restaurando el espacio, e implementando una museografía interactiva, a inaugurar inmediatamente levantada la cuarentena por la pandemia mundial.
Actualmente el Museo Regional se encuentra en desarrollo de un proyecto FMIM de mejoramiento integral y habilitación de todas sus bóvedas las que serán destinadas a depósitos diferenciados de materialidades arqueológicas. Serán implementados con sistemas de depósito mecanizados de fullspace, control climático y cctv, y paralelamente gracias a la donación colaborativa del Museo Chileno de Arte Precolombino, se están implementando las nuevas exhibiciones de las nuevas salas Megafauna y poblamiento Americano, sala Tradición Chinchorro, Sala Formativo en Tarapacá, y Sala Intermedio y Tiahuanaco en los Andes Occidentales. Se creó el nuevo laboratorio de Conservación y Restauración, en el que se han llevado a cabo importantes trabajos como la estabilización de la colección de momias Chinchorro en colaboración con los Restauradores Luis Solar, Cecilia Sandoval y Macarena Urbina.
Citas
[1] Responsable de gestionar los traspasos de colecciones paleontológicas y arqueológicas al MRI en 1960.
[2] Se refiere al hallazgo de Cecioni.
[3] Subrayado es nuestro. Refiere a la colección paleontológica que en 1960 será donada al Museo Regional fundado por la Universidad del Norte.
[4] 1963. Fecha de la publicación.
[5] Inmueble contiguo a la Sala de Exhibición Collahuasi, actualmente propiedad de la Cía. Minera Doña Inéz de Collahuasi.
[6] Referencia a la colección paleontológica en cuestión, aludida en testimonio de M. H. Contreras, citado anteriormente.
[7] Subrayado es nuestro. Cita en plena coherencia con testimonio de M. H. Contreras.
[8] Se refiere a la Colección Nielsen.
Bibliografía
Alfaro Calderón, C. A. 1936. Reseña Histórica de la Provincia de Tarapacá.Sus Industrias. Su Comercio y, Especialmente, las actividades de su Principal Puerto: Iquique.
Anónimo, 1880. Riquezas Peruanas. Lima.
Bermudez Miral, Oscar. 1961.La Vida de Ancker Nielsen en Iquique y su Dedicación a la Arqueología. En: En Viaje. Edición N°328:16-17.
Casamiquela, Rodolfo M. 1967. Enumeración crítica de los mamíferos continentales pleistocenos de Chile. Rehue Revista [s1] del Centro de Antropología de la Universidad de Concepción.
Casamiquela, Rodolfo M. 1969a. Los vertebrados del Cenozoico de Chile, Relato. Actas y Trabajos del IV Congreso Latinoamericano de Zoología. Caracas.
Casamiquela, Rodolfo M & Sepúlveda, F. 1969b Catalogación crítica de algunos vertebrados fósiles chilenos. III. Los Megaterioideos. Sobre Megatherium medinae Phillipi. Anales [s2] dela Academia Chilena de Ciencias Naturales.
Casamiquela, Rodolfo M. 1969-1970. Primeros documentos de la paleontología de vertebrados para un esquema estratigráfico y zoogeográfico del Pleistoceno de Chile. Boletín de Prehistoria de Chile. Departamento de Historia. Universidad de Chile. Año 2. N°2-3:65-74.
Cecioni, G. O. Floreal G. A. 1960. Stratigraphy of Coastal Range in Tarapaca Province, Chile. Volume [s3] 44 N°10: 1609-1620.
Cecioni, G.; García, F. 1960. Observaciones geológicas en la Cordillera de la Costa de Tarapacá. Instituto de Investigaciones Geológicas, Boletín, No. 6, 1[s4] -28.
Cecioni, G. 1961. El Titónico inferior marino en la Provincia de Tarapacá y consideraciones sobre el arqueamiento central de los Andes. Comunicaciones de la Escuela de Geología 1 (3). 19 p.
Cecioni, G.; García, F. 1960. Observaciones geológicas en la Cordillera de la Costa de Tarapacá. Instituto de Investigaciones Geológicas. Boletín Nº6: 28 p. Santiago.
Checura, Jorge. 1985 (1976). Hallazgo Arqueológico en el Cerro Esmeralda 1976. Museo Regional de Iquique. 25 años de labor científica y cultural 1960 – 1985. Corporación Municipal de Desarrollo Social.
Checura, Jorge. 1979. Cero Esmeralda. Sala N°3. Museo Regional. Iquique – Chile. Sotomayor 706.
Donoso Rojas, Carlos. 2013. Una Iniciativa de Desarrollo Precursora para la Región Salitrera. El Instituto de Fomento Minero y? Industrial de Tarapacá: 1943-1953. En: La Sociedad Del Salitre: Protagonistas, Migraciones, Cultura Urbana y Espacios Públicos. Sergio Gonzalez Miranda, Editor. Santiago, Chile: Ril Editores, P.453-484.
Frassinetti, D. & M[s5] . T. Alberdi. 2001. Los macromamíferos continentales del Pleistoceno superior de Chile: Reseña histórica, localidades, restos fósiles, especies y dataciones conocidas. Estudios Geol., 57: 53-69.
Fuenzalida, H. 1963. Un megatherium de Tarapacá. Publicado en: Museo Nacional de Historia Natural, Noticiario Mensual, n.79:.4-5; 8
Iribarren Charlín, Jorge. 1975. Boletín Bibliográfico de Antropología Americana. Instituto Panamericano de Geografía e Historia. Organismo Especializado de la OEA. Vol. 37, No. 46 (1974-1975), pp. 25-27. México.
Larraín, Horacio. 1972. Cuadernos de Investigaciónes Históricas y Antropológicas. Museo Regional de Iquique. Año 1, N°1. 5 de Julio. Instituto de Investigaciónes Históricas y Antropológicas. Centro Universitario de Iquique. Universidad del Norte. Iquique.
Larraín, Horacio. 1972. Boletin Informativo. Museo Regional de Iquique. Año 1, N°2. 15 de Agosto. Instituto de Investigaciones Históricas y Antropológicas. Centro Universitario de Iquique. Universidad del Norte. Iquique.
Larraín, Horacio. 1972. Cuadernos de Investigaciones Históricas y Antropológicas. Museo Regional de Iquique. Año 1, N°2. Septiembre. Instituto de Investigaciónes Históricas y Antropológicas. Centro Universitario de Iquique. Universidad del Norte. Iquique.
Munizaga a., Carlos & Sergio Martínez Baeza. 1961. La Colección Arqueológica Nielsen de Iquique. Apartado de la Revista Chilena de História y Geografía. N°129: 232 – 246. Publicación N°15. Facultad de Filosofía y Educación. Departamento de Ciencias Sociales. Centro de Estudios Antropológicos. Universidad de Chile. Santiago de Chile.
Rojas Cabrera, Héctor. 1986. Iquique: Tradición Arquitectónica.En: Revista ZONA FRANCA Organo Oficial Asociación Usuarios ZOFRI A.G. Abril 86, Año IV. N°41:12-13.
Rojas Cabrera, Héctor. 1986.MUSEO REGIONAL: Centro de Exposiciones Arqueológicas, Etnográficas y Paleontológicas. En: Revista ZONA FRANCA Organo Oficial Asociación Usuarios ZOFRI A.G. Abril 86, Año IV. N°42:12-13.
Sánchez Fuentes, Rigoberto. 2006. Ilustre Municipalidad de Iquique. 1985. Ordenanza Especial de Edificación Calle Baquedano. En: Iquique en el Siglo XX. Documentos y Noticias. Colección Estudios Regionales y Locales. Editorial Universidad Bolivariana – LOM ediciones.
Schaedel R. P. 1957. Informe general sobre la expedición a la zona comprendida entre Arica y La Serena. En: Arqueología Chilena, Contribución al Estudio de la Región Comprendida entre Arica y La Serena, editado por R. P. Schaedel, pp. 1-42. Universidad de Chile. Santiago de Chile.
Schaedel, Richard P. & Ancker Nielsen. 1957. Excavación de un sepulcro cerca de Molle Bajo. Apéndice N°4. En: Arqueología Chilena. Contribución al Estudio de la Región Comprendida entre Arica y La Serena, editado por R. P. Schaedel. Páginas 71 – 72. Universidad de Chile. Santiago de Chile.